Cada año, los Reyes Magos me regalan algún que otro libro de ilustración. Durante el resto del año, recorro algunas de las librerías cercanas a casa y paso amenos ratos ojeando todos los que encuentro, por si acaso tengo que insinuar alguna idea en especial. Casi siempre tengo controladas las últimas novedades, pero tengo que admitir, que desde hace un par de años, los Magos de mi casa, me sorprenden gratamente con alguno inédito, quiero decir, desconocido para mí, así que la alegría es doble.
Esta año he recibido dos libros preciosos: El secreto de la flor que volaba, de Demián Bucay, una fábula sobre la libertad, y Maria Antonieta: Diario secreto de una reina, de Benjamín Lacombe, un libro que me tiene fascinada y que me va a dar pie a realizar alguna que otra entrada en este blog, porque es algo excepcional poder hacer una incursión en la historia y en el mundo de la ilustración, a la vez.